domingo, 22 de marzo de 2015

¿Proyectos equivocados?

Muchas veces empezamos proyectos que al principio nos emocionan y entusiasman. Nos "autoanimamos" a realizar diferentes actividades creativas o formativas que pensamos que nos servirán de mucho en un futuro.
Todo esto lo hacemos porque tenemos debilidades que muchas veces nos hacen pensar que no somos "suficiente", y tenemos la necesidad de evolucionar como personas.
Pero, ¿qué ocurre si esos proyectos no salen como nosotros habíamos esperado? En muchas ocasiones nos vamos a sentir culpables, inútiles, incapaces... Y alguna que otra vez nos afectará en otro campo de nuestra vida si nos descuidamos o habíamos puesto todas nuestras esperanzas en ello.
¿Qué podemos hacer? ¿Rendirnos? Yo no creo que esa sea la solución. Para empezar, según mi punto de vista, habría que retroceder al momento en el que decidimos comenzar con esta idea, recuperar las ganas y la motivación que teníamos. No te quedes parado pensando que todo ha salido mal, esa no es la actitud.
Si quieres hacer algo... Hazlo. No te pares a pensar en que todo se ha ido a la mierda porque has tenido un fallo: Errar es de humanos.
A veces la vida no se desarrolla como la teníamos programada en nuestros sueños, pero en estos casos, hay que saber buscar una opción B, improvisar sin guión alguno, y lanzarte al acantilado.
Siento que esta entrada no tenga que ver con "El Aula" o con "Ícaro: Alas negras" (esos son dos de mis proyectos con próxima improvisación...), pero necesitaba liberar por algún lado lo que siento acerca de las "metas" que muchas veces nos marcamos, y recordarme a mí misma, en un futuro, cuando lea esto de nuevo, que debo recuperar la ilusión que muchas veces pierdo en cosas que me apasionan.

Gracias por leerlo. :)

Pronto habrá novedades acerca de alguna de las dos historias que ya han aparecido en este blog. ;)

¡Un abrazo enorme!